Creemos en el poder de la generosidad. Su apoyo a través de sus donaciones nos permite continuar nuestra misión de difundir el amor, la esperanza y la compasión a nuestra comunidad y más allá. La Biblia nos enseña una norma fundamental para ofrendar. Cuando damos el primer fruto a la iglesia, ponemos a Dios en primer lugar en nuestras vidas. La generosidad es un acto de adoración que expresa nuestra gratitud, fe y amor por los demás.
¡Gracias por unirse a nuestra iglesia en el culto a través de su generosa ofrenda!